Son las 9,30 (de la noche) y con exquisita puntualidad estamos en la zona de estiramientos como cada martes y jueves. Esto lo digo porque si alguien lo desea será bien recibido. Lo raro será que repita. Al grano: Paco me entrega una linterna con un montón de leds o como se llamen para poder guiarnos en los días sin luz lunar. El caso, como no podía ser de otra forma, es que deseaba ponerla a prueba por si tenía que devolverla. El grupo formado por Vicente, Antonio, César, Dani y yo nos ponemos a temblar cuando Paco cruza el Pont del Bimilenari y se adentra río arriba con una oscuridad de cojones, por una senda infernal, piedras sueltas, desniveles, matorrales que sortear... ¡menos mal que llevamos la susodicha linterna!, ¡claro, si hubiésemos trotado por la Avenida de la Libertad no hubiese hecho falta!. Llegamos al camino que nos lleva al merendero del Pantano y, un poco más adelante, nos desviamos hacia la carretera de Aspe. Al final, ya acabando el recorrido de una hora 15 minutos, sale la ansiada luna llena: preciosa pero con un tono amarillento que apenas ilumina. La linterna sigue teniendo su utilidad. Dani, un poco eufórico por nuestra locura colectiva dice que estas carreras "enganchan". Ya estamos haciendo peticiones para que la Fundació de l´Esport Ilicitá organice un evento nocturno donde se regale la más que imprescindible linterna en nuestras noches deportivas y esquizofrénicas. Por cierto, César y Dani, en un momento de debilidad, han insinuado apuntarse a la Media de Elche. ¿Será verdad?.
No dejar de ver el siguiente vídeo. Merece la pena, incluso repetirlo. La música preciosa.
1 comentario:
Espero que ilumine tu camino a lo largo de infinidad de kilómetro, y que podamos compartir gran parte de los mismos.
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