Hoy le he dedicado un poco de mi tiempo a otra de las actividades que me apasionan. Es invierno y es la mejor época para la poda de los árboles pues la circulación de la savia está disminiuda y así el árbol sufre menos. Desconozco la técnica ideal y sólo me dedico a mejorar la aireación del árbol, evitar alguna rama superpuesta, eliminar las que están secas y, en definitiva, mejorar la salud y la estética de la copa del árbol. Mi hermano -en la foto- ha puesto su granito de arena en el empeño. Mencionar una frase típica de los agricultores o de los médicos: "cada profesional es más objetivo y lo hace mejor cuando no hay sentimientos de por medio". Por cierto, esta mañana he realizado una trotada por la Serra Grossa y esta tarde también pues no me he resistido a la llamada de Paco.
1 comentario:
Miedo me das. Entras, podas y vuelves a entrenar. ¿Qué tomas? ¿Ceregumil?
Hasta mañana, espero.
Publicar un comentario